Ya tenemos el
verano casi instalado!! Y va apeteciendo comida más fresca y ligera y por
supuesto postres con mucho colorido, fresquitos, mucho más ligeros y afrutados.
El postre que os
traigo hoy es ideal para estas fechas, porque es fresquito y con un toque a
frutas: se trata de una panna cotta de naranja y limón y como colofón una salsa
de fresas, su textura es suave y gelatinosa, ummm… suena bien verdad? Pues a tomar nota y a cocinar este fácil y veraniego
postre.
La idea la saqué del blog: ¡Qué cosa tan dulce! un blog que me encanta tanto por sus recetas como por sus fotografías!! yo he introducido varias modificaciones a la receta y este ha sido el resultado...
La idea la saqué del blog: ¡Qué cosa tan dulce! un blog que me encanta tanto por sus recetas como por sus fotografías!! yo he introducido varias modificaciones a la receta y este ha sido el resultado...
Os dejo con los
ingredientes y su elaboración…
INGREDIENTES:
Para la panna cotta:
- 500 ml de nata para montar 35% mg (materia grasa)
- 200 ml de leche
- 6 láminas de gelatina neutra
- 100 gr de azúcar blanco
- Ralladura de una naranja
- Ralladura de medio limón
Para la salsa de fresas:
- 200 gr de fresas
- 90 gr de azúcar blanco
- El zumo de una lima
ELABORACIÓN:
Lo primero será
lavar y trocear las fresas e introducirlas en un recipiente junto con el azúcar
y el zumo de la lima (el zumo lo he colado antes de añadirlo a las fresas),
tapamos con papel film e introducimos en el frigorífico durante una hora para
que suelte el jugo.
Después pasamos
a rallar la naranja y el limón, una vez tengamos ambas ralladuras, las
mezclaremos en un recipiente con el azúcar y reservamos.
A continuación,
pondremos las láminas de gelatina a hidratar en agua fría, mientras en un cazo
llevaremos a ebullición la nata y la leche, una vez que hierva, retiramos del
fuego y añadimos las láminas de gelatina, previamente escurridas, removemos
bien hasta que se disuelva. Después colamos esta mezcla y la añadimos al
recipiente donde está el azúcar con las ralladuras y removemos hasta que se
disuelva el azúcar y quede una mezcla homogénea.
Por último sólo
nos queda verter esta mezcla en el recipiente o vasitos que hemos elegido para
presentar nuestra panna cotta, esperamos a que se enfríe durante unos 20 minutos a temperatura ambiente y después
introducimos en el frigorífico durante unos 3 ó 4 horas hasta que cuaje.
Mientras iremos
preparando nuestra salsa de fresas, para ello pondremos en el vaso batidor: las
fresas que ya habrán soltado su almíbar, el azúcar y el zumo de lima, batimos
todo muy bien y colamos para eliminar las pepitas. Una vez que la panna cotta
haya cuajado y justo antes de servirla, vertemos unas cucharaditas de
salsa de fresas por encima de la panna cotta y ya está lista para degustar.
Es
un postre deliciosoooooo…!! Espero que os haya gustado y os animéis a probar
esta panna cotta. ¡Qué tengáis una feliz semana! ¡Hasta pronto!
NOTAS:
- La leche que he
utilizado, ha sido leche entera, pero podéis utilizar la semidesnatada.
- En cuanto a la
salsa de fresas, he utilizado el zumo de una lima, pero sino os gusta, podéis sustituirla
por el zumo de medio limón.